La ciudad de León, Guanajuato es la delicia de quien desea adquirir zapatos y artículos de piel. A León viene quien quiere cambiar sus chanclas viejas o quien acude, dos veces al año, al Salón de la Piel y el Calzado (SAPICA) que congrega a más de 3,000 empresas comercializadoras nacionales de calzado y 220 empresas extranjeras provenientes de 40 países.
En 2020, en plena pandemia, se fabricaron en México 165 millones de pares de zapatos. De ellos, 132 millones, es decir, 80 por ciento, fueron elaborados en el estado de Guanajuato. Y la ciudad en donde se elabora ese calzado es León.
El perfil industrial y de negocios de León se arraiga en el desarrollo generado por la actividad empresarial sustentada en la elaboración de artículos de piel y de calzado, que tiene su origen en el trabajo artesanal del curtido de cueros y zapatos desde 1611.
En documentos hallados en el Archivo Histórico de la ciudad se cita que, en el siglo XVI, estancieros comerciaban con los viajeros que transitaban en carretas en lo que entonces fue llamado la Villa de Valle de Señora (hoy León), lo que motivó a realizar en esa ciudad el proceso de curtiduría de cueros en rudimentarias tenerías y, como consecuencia lógica, se inició también la fabricación de calzado, así como fornituras y herrajes para los paseantes procedentes de diversos puntos de la Nueva España.
Los registros históricos mencionan que en 1719, cuando en la Villa de Valle de Señora había solo 36 casas en las que españoles, indígenas y mulatos manufacturaban zapato, ahí nació la tradición en varias familias que se dedicaron a dicho trabajo que dio origen a la actividad industrial del León actual. De los tradicionales barrios de “Arriba” y el "Coecillo" en el Siglo XVI, uno curtidor y el otro zapatero, el salto cuántico de León ha sido significativo. Datos históricos sobre la industria zapatera local, mencionan que en la Segunda Guerra Mundial la industria zapatera leonesa marcó el despegue.
Hoy, la ciudad cuenta con 8 parques industriales que cubren los estándares internacionales, donde no solo se fabrica zapato, sino que se desarrolla una gran variedad de industrias.
En decenas de plazas comerciales y en la llamada “zona piel”, localizada en las inmediaciones de la Central de autobuses local, miles de fabricantes exponen calzado y artículos de piel que se elaboran para consumo popular y para compradores de gusto refinado. Ahí es posible comprar desde un par hasta un camión repleto de zapatos.
La industria cuero-calzado brinda empleo a 143 mil personas y hoy requiere a 5 mil más para atender la demanda de zapato después de la pandemia. Por eso, venir a León a comprar zapatos y productos de piel no solamente significa encontrar calzado de primera calidad sino ayudar a la reactivación de una de las industrias más importantes del país.
Para recibir a cientos de miles de compradores de calzado, León cuenta con hoteles de primera clase, una oferta gastronómica excelente y atractivos turísticos sensacionales como la Feria de León, en enero, y el Festival Internacional del Globo, en noviembre. Así que Semáforo verde tiene un significado: ¡Vamos a León a comprar zapatos nuevos!