Iraida Noriega hace del jazz su filosofía de vida

Iraida Noriega celebrará  35 años de carrera con el concierto Mundos que presentará en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris

Kevin Aragón | El Sol de México

  · viernes 28 de julio de 2023

Iraida Noriega celebrará  35 años de carrera / Foto: Rafael Arriaga Zazueta

Más que sólo celebrar sus 35 exitosos años de carrera, en los que se ha consolidado como una de las más constantes compositoras y cantantes de jazz mexicanas, Iraida Noriega le cantará a sus 52 años de vida, en su próximo concierto “Mundos”, que tendrá lugar en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, el próximo sábado 19 de agosto.

Será un “concierto-ritual”, en el que la cantante interpretará las canciones que han marcado tanto su trayectoria musical, como experiencia vital, en la que además va a presentar música inédita.

Puede interesarte: Regresa el Festival Internacional de Jazz a la CDMX

“Sí, este concierto refiere a los 35 años que llevo en la música, pero en realidad está mucho más enfocado a los 52 años que tengo de vida. Es por eso mucho de la construcción del concierto, las canciones y de narrativas tienen que ver más con los procesos que siento me han tocado: mis historias de amores y desamores, maternidad, cuando la vida se pone difícil, en dónde recupero y restauro las esperanzas y los caminos”, explica Iraida Noriega, en entrevista con El Sol de México.

“Finalmente, la música o lo que ha pasado a lo largo de su historia, son consecuencias de la vida misma, o al menos así es para mí. Es esa experiencia la que ha sido mi prioridad, más incluso que tener una gran carrera. No veo cómo se puedan separar y lo que creo es que las decisiones que se miran como profesionales, en realidad han sido decisiones de vida”, agrega la cantante.

UN PROCESO DE ALMA

Con esta idea de fondo, Iraida adelanta que entre los temas que buscará proyectar sobre el escenario son un “proceso de alma”, en el que ella contempla al jazz como uno de los elementos sustanciales, principalmente por la filosofía que implica su ejecución.

“Tengo que agradecer al jazz porque me introdujo al mundo de la improvisación, que ha sido para mí la filosofía de vida, pues creo que en realidad estamos todo el tiempo improvisando, con las pocas certezas que tenemos en esta vida. La única certeza que tenemos es la muerte y todo lo demás está en juego, por eso el ejercicio de la improvisación abona un poco de tranquilidad y esperanza entre toda la incertidumbre. Como diría Miles Davis: ‘Hay que tener la seguridad de que eres capaz de responderle a la vida con lo que te da y lo que te quita’”, explica la compositora.

El concierto también contempla reflexiones sobre el significado del mar que tiene para la vida de Iradia, que se ha vuelto el lugar de encuentro consigo misma y con el mundo que la rodea; así como la maternidad, cambio radical en la vida, que se ha convertido en una gran lección de amor incondicional.

Sin embargo, Iraida comenta que el elemento que más quiere resaltar en este concierto es el reconocer que “en verdad vivimos en manada”. “Uno tiene un espacio de soledad que es vital, pero si en verdad queremos conquistar las grandes aguas, es mucho mejor si lo hacemos acompañados”.

EL JAZZ, UNA OLA EN LA PERMANENCIA

Al mirar en retrospectiva sus 35 años de carrera, Noriega comenta que hay que reconocer que el jazz se ha vuelto un género que tiene cada vez mayor presencia en el la cultura popular de las personas, específicamente en el medio de los centros nocturnos, clubes y otros espacios recreativos de la Ciudad de México.

“Yo recuerdo una entrevista con Eugenio Toussaint, en el que hablamos sobre que el jazz respondía a olas de moda. Sin embargo, lo que vemos es que desde 2008, parece que la ola está logrando una especie de permanencia. El movimiento está muy vigente, siempre hay gente que genera proyectos de jazz, pero lo curioso es que en la Ciudad de México cada vez es más común escuchar jazz en vivo, a diferencia de otros géneros, como el rock”, afirma la jazzista, quien mira con felicidad que cada vez hay más músicos jóvenes que entienden, igual que ella, el jazz como una filosofía de la improvisación.

Como una de las figuras femeninas que han tenido gran relevancia en el jazz mexicano, la cantante confiesa que se ha enfocado en evolucionar como intérprete más que en luchar por un lugar a través de su género. Esa característica es la que aprecia en músicas que con su talento han logrado destacar. Sin embargo, lo que mira con gran aceptación es el hecho de que el trabajo de las mujeres instrumentistas son más reconocidas, al igual que las cantantes.

➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo

“Es que es como todo. Si uno pone toda la energía en crecer y ser cada vez mejor creadora, tarde que temprano el reconocimiento del trabajo rebota”.

TENEMOS CANCIONES PRECIOSAS

Bien conocida por interpretar fusiones de clásicos de la música popular mexicana como Bésame mucho, de Consuelito Velázquez o Día nublado de José Alfredo Jiménez, Iraida afirma que las canciones del repertorio popular mexicano son “sin ninguna duda hermosas”. Característica que le ha permitido encontrar camino en el mundo del jazz, a través de los tiempos.

“El jazz es un género generoso, que por su apertura permite hacer nuevas fusiones. Creo que estamos en un momento en que los compositores y los fanáticos de la música mexicana, han respondido con gran orgullo los cambios y las fusiones del repertorio de nuestro gran cancionero. Cada vez es más abierto, algo que es muy beneficioso, pues permite la difusión de la música mexicana en el mundo, pero también nos da la oportunidad a los músicos”, finaliza.