León, Guanajuato.- Noche de fiesta, euforia y lágrimas, a horas para que se dé el primer choque entre Club León y Los Ángeles FC en la final de la Concachampions, la fiesta y el éxtasis futbolero se presentaron en el hotel de concentración donde centenares de aficionados acudieron para llevarles "serenata" a su equipo de cara al duelo inédito.
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Por primera vez La Fiera disputa la final del máximo certamen de clubes de la Concacaf y la cita con la historia ha despertado un ánimo pocas veces visto entre la grey felina, equiparable con la ya mítica noche del 12 de mayo de 2012, aquella en la que se logró el tan esperado ascenso a Primera División.
Once años después del regreso a la máxima categoría, periodo en que se han conseguido tres títulos de liga, ahora la exigencia para la institución verdiblanca es dar el “zarpazo” internacional y la cita ante el LAFC resulta ideal, para muchos es el momento de rugir como un grande de la Concacaf.
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La noche previa al primer asalto ante la plantilla comandada por Cherundolo y que tiene en el mexicano Carlos Vela a su principal figura, se pintó de verde y blanco, alrededor de tres mil personas acudieron al hotel de concentración para manifestar su apoyo entre aplausos, porras, rechiflas y cánticos.
Previendo una nutrida cantidad de asistentes, personal de seguridad instaló vallas metálicas para delimitar la zona donde debía permanecer la gente. Esta velada fue convocada por el grupo de animación Los De Arriba con invitación abierta a la afición en general.
FIESTA VERDE
Para las 20:00 horas llegó el primer contingente de barristas, mismo que instaló sus "trapos" con el fin de formar un pasillo cuyos costados fue ocupado por cientos de espectadores, al centro se ubicaron los instrumentos y las banderas monumentales de la porra.
A los 30 minutos inició la fiesta, los instrumentos de percusión: las tarolas y los bombos, dieron la señal a la marea verde que comenzó a saltar y aplaudir, luego siguieron las trompetas que dieron forma a los primeros cánticos de la noche.
Junto a las bengalas de brillo esmeralda, se elevó en el aire varias columnas de humo verde y blanco, mismo que se expandió por todo el espacio gracias a las banderas por lo que el ambiente por momentos tuvo un aspecto neblinoso.
COMUNIÓN FELINA
Entradas las 21:10 horas, se dio el clímax de la noche, Nicolás Larcamón y su plantel salieron para integrarse a la celebración, Byron Castillo, Alfonso Alvarado y Fidel Ambriz fueron algunos de los que grabaron desde sus smartphones la escena.
Siendo líder del grupo, Rodolfo Cota tomó la vanguardia del grupo y fue el primer en internarse entre sus seguidores, detrás le siguieron Elías Hernández, Lucas Romero, Stiven Barreiro y demás.
Una vez dentro de la masa de gente, el plantel felino demostró comunión con sus aficionados, algunos como mena ondeando banderas, Yairo Moreno se puso un sombrero de carnaval, otros más como Paul Bellón, Osvaldo Rodríguez y el “Jefecito” Rodríguez aplaudían o saltaban.
Para cerrar la “serenata”, Stiven Barreiro tomó el micrófono para agradecer: “Es un placer estar con ustedes, no saben lo que significa para nosotros este apoyo, vamos a dejar todo mañana. Arriba La Fiera”.
Larcamón por su parte añadió: “Agradecemos en nombre de todo el equipo, este apoyo sabemos que no iba a faltar, quiero que sepan que los jugadores van a dejar todo. ¡Vamos León, carajo!”
Justamente, Nico se dejó querer por sus seguidores, el estratega siempre lució sonriente, se tomó fotos, firmó autógrafos, tomó en brazos a varios menores y se abrazó con varias personas, también arengó a los barristas a tocar más fuerte. Para las 21:30 el equipo se retiró a descansar con miras a dejar el alma en la grama del Estadio Nou Camp.