León, Guanajuato.- Estados Unidos sigue siendo amo y señor en el baloncesto femenil de la categoría Sub-17. El equipo de las barras y las estrellas conquistó el Campeonato Mundial 2024 celebrado en León e Irapuato, esto luego de vencer en la gran final por score de 84-64 a su similar de Canadá.
Es cierto, no fue el día de campo de años pasados y es que el representativo del país de la hoja de maple vendió caro el descalabro frente a un adversario acostumbrado a luchar en esta clase de instancias, mientras que las canadienses por primera vez afrontaron un encuentro de dicha envergadura, toda vez que su mejor resultado en la competencia había sido el tercer lugar cosechado en 2012 en la edición desarrollada en Holanda.
Las norteamericanas basaron su resultado en las 25 unidades fabricadas en un segundo periodo que rayó en la perfección. El conjunto entrenado por la coach Meg Barber calentó la mano desde dentro y fuera del perímetro, prueba de eso fue el doble dígito que al medio tiempo presumía McKenna Woliczko, en tanto que Jordyn Palmer colaboró hasta con siete tablas. Los 22 rebotes, en su mayoría defensivos, no le fueron suficientes a Canadá durante esos lapsos iniciales y es que su cuota de puntos resultó raquítica, de esta manera, las estadounidenses se fueron al descanso con 11 de ventaja.
Pero los errores que no se presentaron en la primera mitad, llegaron en el tercer cuarto para las del vecino país del norte, quienes batallaron demasiado para rebasar la barrera de los 10 puntos. El representativo rojiblanco arrancó con seis sin respuesta, de hecho, se puso a una sola posesión por debajo, solo que Jerzy Robinson y Woliczko sacaron el oficio y jugando con la bandeja, mostrando poder dentro de la zona pintada, hicieron efectivos sus encestes para seguir poniendo tierra de por medio y allanar el camino rumbo a un cuarto periodo que resultó de mero trámite.
En ese pasaje final, el seleccionado norteamericano volvió a despertar y colocó una diferencia de doble dígito a través del jumper de Addison Bjorn. Canadá le dio rotación a su quinteta buscando soluciones, pero lo único que encontró fue el embate definitivo liderado por la californiana Robinson, quien cerró con 25 unidades, seguida de Woliczko con 19, en tanto que del otro lado, Savannah Swords fabricó 15 puntos.
Las estadounidenses ahora poseen seis coronas en siete Mundiales jugados, recordando que solo en 2016 en España no llegaron a la final, aunque se quedaron con el tercer sitio tras doblegar a China. No pasarán muchos años para que esta generación comience a brillar en el deporte ráfaga de la NCAA y después a nivel profesional en la WNBA.
