León, Gto.- No importa si es por fecha mundialista o Rally de las Naciones, lo cierto es que todas las arrancadas que se realizan en la Alhóndiga de Granaditas de Guanajuato capital son simple y sencillamente majestuosas, de lo mejor que se puede observar en el mundo del deporte motor.
Y es que como todos los años, la Ciudad Cervantina se vio cimbrada con el estruendoso rugido de los motores, en este caso el de un evento que cumple su tercera edición y que pretende acaparar los reflectores internacionales con miras a que el próximo año retorne el Rally Guanajuato México al calendario del WRC.
Con tripulaciones de 13 países y visitantes de diferentes latitudes, la ceremonia de inicio fue un obsequio que incluyó un recorrido por todo el color, el folclor y la cultura de tierras aztecas. No pudo faltar la música del mariachi, el show de luces, la pirotecnia y un sentido homenaje a Juan Suberville, padre del Rally México y quien falleciera el año pasado.
El primer auto en el arco de salida apareció en punto de las 20:05 horas, fue el Skoda Fabia del noruego Mads Ostberg y quien fue recibido en medio de una gran ovación de parte de los aficionados al rallismo que año con año abarrotan no solo las escalinatas de la Alhóndiga, sino también las diferentes zonas habilitadas para presenciar los primeros dos tramos callejeros, sobre todo en la famosa glorieta de la UNESCO, también conocida como los Pastitos, donde se situó el grueso de espectadores y que armó un show aparte con el juego de luces propiciado por las cámaras de sus dispositivos móviles para guardar el momento en que los bólidos derraparon por esa zona.
“Feliz de poder vivir esta experiencia, ya no se cuantos años tengo de estar viniendo a México y cada vez que regreso es sorprendente, siempre me encuentro con algo nuevo y quiero que todos los fans lo disfruten junto conmigo”, manifestó el escandinavo.
Pero sin duda, la legión mexicana acaparó los reflectores y los gritos, en especial los de mayor recorrido como el potosino Ricardo Cordero con su Citroën C3 R5 y el capitalino Pancho Name al volante del Subaru Impreza WRX STi. Mención especial para el francés Julien Ingrassia, quien por mucho tiempo vivió esta arrancada como navegante del ocho veces monarca mundial, Sebastien Ogier y ahora siendo el protagonista.
Tras desfilar por el podio y brindar algunas palabras, los pilotos se enfilaron a una doble pasada por la especial callejera a través de los míticos túneles y calles adoquinadas. El tramo de 1.12 kilómetros resultó espectacular y es que nadie se guardó nada, por el contrario, el olor a goma quemada fue la esencia que levantó las emociones.
Para este sábado, el Rally de las Naciones entrará a su parte medular con las primeras seis etapas en tierra. En doble pasada se recorrerá Ortega (9:53 y 14:27 Horas), Las Minas (10:41 y 15:15 Horas) y Las Dunas (11:49 y 16:28 Horas).