El equipo mexicano pasó de panzazo

San Antonio.- Si Osorio utilizó el juego frente a Bosnia para detectar a algunos elementos que puede subir al barco que zapará a Rusia, los resultados son bajos. El examen bosnio lo superó de panzazo. Juan Carlos les brindó minutos a distintos  jugadores y pocos aprobaron la prueba.

Hugo Ayala apareció para darle un número al marcador, pero el desempeño fue gris.

Rusia está cerca y México todavía no define a todos sus tripulantes. Osorio cuenta con los europeos, pero en casa hay pocas variantes.

Los juegos de marzo frente a Islandia y Croacia, ya con la legión foránea, definirá a la mayoría de los mundialistas. A varios elementos locales tal vez su oportunidad se les fue.

El juego

El Tricolor lo advirtió y lo cumplió, los jugadores que eligió Osorio entraron al Alamodome decididos a llenarle el ojo al colombiano y levantar la mano para ir al Mundial. El vértigo estuvo presente en el amanecer del partido, Carlos Vela por el lado izquierdo pidió el balón de inmediato y trató de hacer daño.

Carlos fue el elemento más activo del lado verde, el antes jugador de la Real Sociedad intentó herir a Bosnia con tiros de lejos y pases precisos a Henry Martín.

El rival europeo se notó desconcertado, Robert Prosinecki no esperaba que el equipo de México lo atacara de esa forma.

El Tricolor siguió encima, Orbelín Pineda, también por la pradera izquierda fue un peligro constante.

Gío por el sector diestro estuvo menos participativo, pero también tuvo una oportunidad para marcar. Su tiro salió directo a Sehic.

Elías Hernández no se quiso quedar atrás y el solo se creó una jugada que terminó con un tiro de lejos. Su fogonazo lo detuvo el cancerbero.

Luego de eso vino un respiro en la batalla, Bosnia se volvió más sólido y le dificultó el traslado del balón a los verdes.

Con los europeos mejor ubicados llegaron los problemas para el Tricolor. México evidenció falta de entendimiento en alguns zonas.

Henry Martin estuvo muy solo al frente, el delantero del América se desesperó por no tener balones cerca de él.

Los pocos embates del equipo bosnio fueron desarmados de inmediato, Alanís sufrió un poco, pero luego se afianzó. Su falta de ritmo es  muy evidente.

Elías, Vela y Orbelín volvieron a apretar por el lado izquierdo antes de ir al descanso, pero el tanto no llegó.

Al volver al campo Osorio decidió cambiarle el rostro al Tricolor. El técnico colombiano ingresó de un jalón a Néstor Araujo, el “Burrito” Hernández, Jonathan dos Santos y Javier Aquino. Los cambios fueron en todos los sectores del campo. Gío, de discreta actuación dejó el campo junto a Alanís, Molina y Orbelín.

Prosinecki no se quedó atrás y también efectuó dos movimientos. Las nuevas piezas de ambos equipos tardaron en embonar, pero fueron las mexicanas las que al parecer funcionaron ligeramente mejor.

Osorio no se conformó con esas modificaciones y decidió darle minutos a la sensación Jonathan González. El volante de Rayados se acomodó detrás de los atacantes y de a poco mostró su calidad.

México volvió a ser ligeramente mejor y ya no perdonó. Hugo Ayala con la cabeza logró abrir el marcador.

El tanto mexicano provocó que Bosnia bajara la guardia, el Tricolor  acechó el área europea en busca de incrementar el marcador.

Bosnia optó por volver a cambiar a varias piezas.

Al tener a otros jugadores el juego se descompuso. México, con más esfuerzo que futbol, buscó otro tanto, pero ya no llegó.

Bosnia se quedó con un elemento menos, sin embargo los verdes no lo aprovecharon. El tiempo ya era poco.

El tanto de Ayala fue suficiente para lograr el triunfo. El Tricolor de forma deslucida venció a Bosnia y ya piensa en los juegos de marzo. El Mundial está cerca.