Jeddah, Arabia Saudita.- Luego de poco más de 10 horas de viaje y un par de escalas, La Fiera ya se encuentra en tierras mundialistas y con la motivación a tope para arrancar este próximo viernes por la mañana su participación en el Mundial de Clubes 2023 a efectuarse en tierras saudís.
El plantel esmeralda que comanda Nicolás Larcamón salió de la capital cuerera la madrugada del domingo, tomó un vuelo privado rumbo a Texas, posteriormente se dirigió a la capital norteamericana, Washington y de ahí partió hasta Jeddah. El equipo felino viajó con todas las comodidades que brinda la principal aerolínea de Arabia Saudita y como bien lo merece el actual monarca de la CONCACAF.
Ya en suelo árabe, los verdiblancos lucieron de gala, descendieron del avión y caminaron por el Aeropuerto Internacional Rey Abdulaziz ataviados en un traje gris en el que resaltó en el pecho uno de los primeros escudos que llegó a tener la institución allá por la década de los 50´s; de igual manera, el atuendo fue complementado por una camisa y un calzado casual en color negro.
De inmediato y tras sacarse las fotos de bienvenida a las afueras de la terminal aérea, el cuadro guanajuatense se dirigió hacia su hotel de concentración, en donde tuvo la oportunidad de descansar algunas horas, comer y por la noche realizó su primer entrenamiento en las instalaciones del King Abdulaziz Sports Center, una práctica meramente regenerativa para sacarse de encima las largas horas que implicó el viaje.
Larcamón y compañía no pudieron ocultar el buen ánimo que hay en el grupo en estos días previos al debut frente al Urawa Red Diamonds de Japón. Al interior del Club León se disfruta el momento, pero también se sabe de la responsabilidad que hay por delante ya que de no ganar al elenco asiático, la aventura terminaría prematuramente.
La misión es poder sacar adelante este primer choque y luego alistarse para la que sería una cita con la historia en semifinales ante el monarca de la UEFA Champions League, el Manchester City de Inglaterra, donde pase lo que pase, los panzas verdes ya habrían asegurado un encuentro más, al igual que ubicarse entre los mejores cuatro cuadros del planeta.