Ocho años después de haber levantado la Copa, la Selección Española disputará el Mundial por onceava ocasión consecutiva. Sin embargo, a diferencia de otras ocasiones, al de Rusia 2018 llega más fuerte que nunca.
No podrá contar con el veterano David Villa, su máximo goleador histórico. Pero a cambio tiene en sus filas a una camada de nuevos talentos surgidos de la imperiosa necesidad de dar paso a su cambio generacional tras el fracaso sufrido en Brasil 2014.
La precisión de su juego, basado en el control absoluto del balón y el toque abrumador en el pase, hacen que el combinado español sea temido, incluso, por las grandes potencias, como la de Argentina, a la que el martes pasado goleó 6-1.
Sí estará el ya legendario Andrés Iniesta, su gran estrella, que está próxima a dejar de brillar pero que antes promete dar un último destello de la maestría que lo distingue en el medio campo, como con el que le dio el título mundial a España en Sudáfrica 2010.
Lo anterior intentará aprovecharlo en la delantera Isco Alarcón, un joven talentoso que va en ascenso, quizá, a paso lento, pero muy seguro.
De igual forma pasa en la defensiva, en la que Sergio Ramos y Gerard Piqué, del Real Madrid y Barcelona, curiosamente, hacen un dúo dinámico en el centro gracias a su vasta experiencia; muy bien reforzada en los laterales con Dani Carvajal y Jordi Alba, también del conjunto merengue y culé.
Son sólo unas muestras de la mezcla perfecta entre juventud y experiencia con la que España buscará abrirse paso en el Grupo B, en el que su rival a vencer será Portugal, en una gran oportunidad que muy seguramente se le presentará precisamente a Isco Alarcón, frente a Cristiano Ronaldo, para demostrar que es un gran jugador.
Lo anterior no podría ser mejor administrado que por Julen Lopetegui, ya que conoce a la perfección las fuerzas inferiores de la Selección Española, al haberla dirigido en la Sub-19, Sub-20 y Sub-21.
No es de extrañarse que el técnico haya llegado para reinventar a La Roja, fiel a su estilo de juego, pero con nuevos exponentes que le permitieron mantener el invicto durante las eliminatorias mundialistas y los últimos partidos amistosos.