La victoria en León dejó sensaciones encontradas en Nicolás Larcamón, por un lado la satisfacción de regresar a la senda del triunfo, aunque por el otro, la incógnita de cara a lo que viene al tener varios elementos suspendidos.
“El partido fue demandante, son juegos donde primero enfrentas al subcampeón, un equipo de jugadores con muchísima jerarquía, luego esta cancha (Nou Camp) siempre es una parada durísima y con la expulsión temprana te traspasa la responsabilidad aparente de ganar el juego con uno más, así que fue un partido exigente contra jugadores que conjugan una buena capacidad de asociación y verticalidad. Nosotros debíamos entender que la construcción del triunfo debía ser progresiva y así fue, lamentamos haber fallado en la contundencia, tuvimos jugadas claras que de haber capitalizado nos hubieran dado mayor tranquilidad, pero los muchachos mostraron entrega y carácter en un momento muy importante”, dijo Larcamón.
Respecto a lo que fue una cuestionada labor arbitral de Eduardo Galván, quien le mostró rojas al chileno Pablo Parra y el juvenil Alberto Acosta, además de una amarilla a Juan Segovia que lo hará perderse el siguiente duelo, el argentino indicó que “la verdad no siento que haya influido, creo tuvo un buen papel y no tengo nada más que decir de eso”.
Los “Larcaboys” ya piensan en el súper líder Pachuca, un oponente que “será exigente por las ausencias que tenemos, hay poco tiempo para preparar ese juego y vamos a tener que pensar bien por las bajas, pero más allá de eso, el grupo tiene claro que todos son importantes y pueden saltar al ruedo, al que le ha tocado ha respondido y esa es una situación que me deja tranquilo”.
Finalmente, el timonel de La Franja señaló que de cara a la recta final de la fase regular, la fortaleza del cuadro camotero será “la capacidad colectiva que tenemos para afrontar el contexto que sea y esta fue una de esas tardes que quedarán en el recuerdo porque se venía careciendo de contundencia y de esa sensación para cerrar los juegos”.