León, Guanajuato. - El Día Mundial de la Fertilidad se conmemora cada 4 de junio con la finalidad de hacer un llamado de atención sobre los problemas para embarazarse que se presentan cada vez, con mayor frecuencia en la población, así como identificar el momento indicado para consultar a un especialista.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México afecta a 2.6 millones de parejas en edad reproductiva.
¿Qué es la infertilidad?
La infertilidad se refiere a cuando no se produce un embarazo pasado un año de relaciones sexuales sin el uso de algún método anticonceptivo, o bien cuando haya dificultad para mantener la gestación.
Esta enfermedad es reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y existen diferentes tratamientos para quienes han presentado dificultades para concebir.
¿Qué puede afectar la fertilidad?
La fertilidad no solo afecta a la mujer, también se presenta en el hombre y aunque la tendencia actual es que se decide ser padres a una edad no tan joven, e incluso tener menos hijos, también se ha visto con frecuencia que se presentan cada vez más problemas para conseguir el embarazo.
Un estudio internacional sobre las causas de la infertilidad masculina, comparte que casi un 15% de los hombres presentan esta condición en la actualidad. Dentro de este grupo, un 40% desconoce las causas, un 30% se trata de pacientes con seminogramas alterados y un 15% es debido a algún trastorno genético vinculado a un problema de fertilidad.
No se trata solo de una cuestión de edad, existen muchas más causas que la provocan. En el caso de las mujeres pueden ser:
- Falta de ovulación.
- Endometriosis (crecimiento del tejido interior del ùtero, fuera de este, en las trompas de Falopio o en los ovarios).
- Fibromas uterinos.
- Trompas de Falopio bloquedas.
En el caso de los hombres, la causa de la infertilidad puede deberse a:
- Bajo recuento de espermatozoides en el semen, o ausencia de ellos.
- Baja movilidad de los espermatozoides.
- Espermatozoides que no se han formado adecuadamente.
- Semen espeso que no permite llegar a los espermatozoides al óvulo.
- Problemas hormonales.
- Problemas de eyaculación.
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¿Cómo se puede mejorar la fertilidad?
Existen ciertos consejos y/o medidas que pueden aplicarse tanto al hombre, como a la mujer que pueden beneficiar a la hora de estar preparado/a para conseguir un embarazo, además dotarte de una mejor salud en genera.
- Llevar una dieta sana y equilibrada.
- Controla tu peso.
- Evitad el tabaco.
- Realizar ejercicio físico con frecuencia.
- Fuera el estrés.
- Acude a un especialista.
¿Cuáles son los distintos tipos de tratamientos de fertilidad?
Gracias a la tecnología, hay muchas maneras de ayudar a las personas con toda clase de problemas de fertilidad. Las mejores opciones para ti dependen de tu situación personal y de la causa de tu infertilidad.
A veces solo una de las personas de la pareja necesita tratamiento; otras, ambos han de usar una combinación de tratamientos.
A menudo, los tratamientos de fertilidad incluyen medicamentos que estimulan las hormonas y la ovulación, a veces combinados con procedimientos quirúrgicos menores. La tecnología de reproducción asistida abarca varias clases de procedimientos que te pueden ayudar a tener un bebé: facilita que un espermatozoide fecunde un óvulo y contribuye a que este se implante en el revestimiento uterino.
Dos de los tratamientos de fertilidad más comunes son: la inseminación intrauterina, en la que se recolecta esperma sano y se lo inserta directamente en el útero durante la ovulación; y fertilización in vitro (FIV) en la que se extraen óvulos de los ovarios y se fecundan con esperma en un laboratorio, donde se desarrollan como embriones. Luego, un médico coloca los embriones en tu útero.
La criopreservación (congelación de óvulos, esperma o embriones), la donación de óvulos o embriones, y los portadores de gestación (subrogación) también son formas de tecnologías de reproducción asistida.
La donación de esperma, la donación de óvulos y la subrogación son utilizadas a menudo por parejas del mismo sexo o por personas solas que desean tener un bebé. También se puede usar esperma u óvulos de un donante si la infertilidad se debe a un problema con tus propios espermatozoides u óvulos.
Hablar con un médico especialista en embarazo o infertilidad puede ayudarte a decidir cuál es el tratamiento más adecuado para ti.