“¡Detente!... enemigo, el corazón de Jesús está conmigo” es un pequeño emblema que suele llevarse en el bolsillo o la cartera a manera de protección, y que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, mostró hoy, a algunos reporteros.
No es la primera vez que lo muestra, ya lo hizo anteriormente cuando era candidato a la Presidencia de la República.
El origen del emblema
El origen del “detente”, como comúnmente se le conoce, se remonta a 1686, según se atestigua en una carta que Santa Margarita María Alacoque envió a la Madre Saumaise el 2 de marzo, en la que dice: “Él (Jesús) desea que usted mande a hacer unas placas de cobre con la imagen de su Sagrado Corazón para que todos aquellos que quisieran ofrecerle un homenaje las pongan en sus casas, y unas pequeñas para llevarlas puestas”.
Santa Margarita llevaba uno de los amuletos sobre su pecho debajo del hábito e invitaba a sus novicias a hacer lo mismo, pues decía que su uso era muy agradable al Sagrado Corazón de Jesús.
Pero no fue sino hasta 1720 cuando una terrible plaga en Marsella, Francia, que el pequeño objeto se difundió entre todos los fieles.
Llevar el ¡Detente! No podía quedar sólo en una costumbre santa, sino que debía tener consecuencias para todos los creyentes católicos. Por eso Pío IX, el 14 de julio de 1877, concedió 100 días de indulgencia para todos los que portaran la insignia y rezaran diariamente un Padrenuestro, una Avemaría y un Gloria.
Ahora, Andrés Manuel López Obrador siempre lleva consigo uno de los “¡Detente!” para que lo proteja de sus enemigos y de las malas vibras.
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