El futuro nos alcanzó, en este 2018 el gasto destinado al pago de pensiones podría representar casi el total de lo recaudado por concepto del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Y lo anterior, porque de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2018, se destinarán 800 mil millones de pesos para el pago de pensiones, mientras que en la Ley de Ingresos (LIF) de este año se espera una recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) de al menos 876 mil millones de pesos.
Ante ello, Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), no escatima en sostener que “el problema de las pensiones ya es una realidad fiscal”, pues tan sólo en 2017 el gasto por dicho concepto representó 3.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), y la recaudación del IVA constituyó 3.9.
“El pago de los pasivos laborales ha sido una fuerte presión para las finanzas públicas y lo seguirá siendo en al menos las siguientes dos décadas”, advirtió.
En este sentido, cabe mencionar que tan solo en 2009, el gasto total en pensiones representó 2.5 por ciento del PIB y para el cierre de 2017 alcanzó 3.7, lo que constituyó un incremento de 1.2 puntos porcentuales en nueve años, con una constante tendencia al alza.
La Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), informó que para el 2018 el gasto del gobierno en pensiones aumentó 5.2 por ciento con respecto a lo destinado en 2017.
Según el CIEP, las pensiones han sido una de las razones por las que el gasto ejercido ha sido mayor a lo programado desde mediados de la década pasada.
