León, Gto.- La pandemia detonó la disrupción en las cadenas de valor nacionales e internacionales. A largo plazo hay factores que se van a acrecentar como las tecnologías emergentes, medio ambiente (cambio climático) y tensiones geopolíticas, por ejemplo la disputa comercial entre China y Estados Unidos, compartió Horacio Leal Straffon, gerente senior de Kearney, en su ponencia durante la Resiliency: Navigating Global Value Chain Disruption in un age of uncertainty.
Comentó que es importante asegurarse de la manufactura de bienes de consumo, autopartes, químicos, entre otros, para tener una perspectiva holística sobre cómo reaccionar a la disrupción en empresas de todos tamaños y de cualquier parte del mundo.
Informó que las compañías valoran factores relevantes, pues la Covid-19 despertó el interés de reaccionar en las cadenas de producción, por lo que propusieron la “Brújula de resiliencia”, una herramienta para desarrollar la capacidad de resistir esa volatilidad.
Compartió que en el tema de la demanda, el portafolio de excelencia es contar con productos, orientación al consumidor, estar cerca de las capacidades del mercado de forma física y desde un punto de vista de las preferencias, entender qué quieren clientes a nivel global, la viabilidad financiera se refiere tener la capacidad de contar con flujo de efectivo para hacer gastos para continuar con la producción y hacer ajustes operativos sin alterar la misma, y la versatilidad para ir al mercado de forma más eficiente.
Por otra parte, en cuestión de la oferta se debe buscar la flexibilidad logística para tomar decisiones más rápidas en la cadena de valor, la capacidad de adaptación manufacturera y que se pueda apalancar la producción y que los nodos puedan ser intercambiables de manera sencilla, también la diversidad de proveedores que se requiere, ser comprometidos y desarrollar modelos de gestión de proveedores que fomenten la colaboración y finalmente la planeación anticipada para buscar alternativas, ajustar planear la producción y contar con una estrategia para cada escenario.
En el grupo de líderes están aquellos que están tomando las decisiones estratégicas, que toman en cuenta para sus negocios, aparte de posicionarse bien, están bien preparadas y necesitan reaccionar rápido y que en vez de trabajar en modalidad reactiva.
Estas empresas actúan de forma anticipada, planean los escenarios y reconocen que están actuando hoy en día en un escenario de incertidumbre y bajo eso toman sus decisiones.
El camino a seguir es a través de los perfiles líderes, lo que lleva tiempo e inversión, y son el colaborador es decir desarrollar alianzas, la planeación tratar de desarrollar de gestión de riesgos mucho más rápido, aquél líder que logra apalancar su red de producción para enfrentar de manera más adecuado, el adaptador actúa sin perder la calidad y aumenta la capacidad de resiliencia, y el proveedor, se refiere llegar más rápido al consumidor.
El punto de arranque de las empresas se ve en 4 niveles, sólo tienen capacidad reactiva y sólo apagan fuego, hay empresas que identifican algunos puntos débiles y ejecutan algunas acciones, pero no lo hacen con una visión integral, hay empresas que utilizan cierta información que se genera de manera digital para tomar decisiones a lo largo de la cadena y otras tienen una visibilidad de la cadena de valor, tienen herramientas y tienen respuesta ante las adversidades.
Es importante que la empresa no tenga miedo a hacer un diagnóstico de donde está la organización en la actualidad, hacia donde se tiene que ir de forma inmediata y poner una serie de actividades en un mapa de ruta.
“Esta es una herramienta que se generó a nivel global con empresas líderes, pero eso no implica que se pueda utilizar para empresas de cualquier tamaño a nivel local y regional. Nuestro objetivo es que este aprendizaje sea útil y que todos estemos más preparados para enfrentar estas condiciones de adversidad”, concluyó.