Como cada año, esta ocasión se celebró el Domingo de Ramos con una procesión que se realizó de la Plaza Fundadores a la Catedral Metropolitana de León y con una misa encabezada por el arzobispo de León, Alfonso Cortés Contreras, donde invitó a los feligreses a cargar la cruz y continuar con el camino al lado de Jesús.

Con esta tradicional costumbre se conmemora la entrada de Jesús a Jerusalén y es el inicio de la Semana Santa.

Cientos de feligreses se dieron cita a lo largo y ancho de la calle que conduce hacia la Catedral y la caminata concluyó en ésta misma.

El padre bendijo las palmas mismas que posteriormente servirán para realizar la ceniza para los próximos Miércoles de Ceniza.

Sin embargo, muchas personas acostumbran ponerlas detrás de las puertas de sus casas durante todo el año como símbolo bendito, pues así lo dicta la tradición.

Cortés Contreras terminó la misa recordado que la Semana Santa es un tiempo para reflexionar y estar con Jesucrito, por lo que pidió a los feligreses tomar la decisión de caminar al lado de él para continuar con su andar en la vida.

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