Detienen a extesorero de Bárbara

Se le atribuyen contratos con empresas fantasmas, provocando así el desvío de recursos públicos

Ignacio Ramírez

  · miércoles 26 de junio de 2019

FOTO: DUPLICADA

A casi cuatro semanas después que la exalcaldesa de León Bárbara Botello Santibáñez fuera detenida por elementos de la Fiscalía General del Estado, de manera voluntaria se entregó el extesorero municipal Roberto Pesquera Vargas por el presunto delito de peculado.

La Procuraduría, ahora Fiscalía, habría girado una orden de aprehensión en su contra desde noviembre de 2016, incluso se había solicitado apoyo de la Interpol ante la posibilidad de que haya abandonado el país; a Pesquera Vargas se le acusa del desvío de recursos y firmar contratos con empresas fantasmas durante la administración 2012-2015 que encabezó Bárbara Botello Santibáñez y concluyó Octavio Villasana.

Fue la mañana de este miércoles, que el exfuncionario decidió entregarse a las autoridades y atender las acusaciones en su contra tras poco más de dos años en que se mantuvo prófugo; a pesar de contar con un amparo concedido por el Tribunal Colegiado en Materia Penal del Poder Judicial de la Federación en febrero del año en curso, decidió entregarse.

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Al mediodía de hoy se llevó a cabo la audiencia en el juzgado tercero de lo penal, compareciendo ante la jueza Cristina Rábago Morales, misma colegiada que llevó el caso de Bárbara Botello, donde el extesorero reconoció el delito y realizó la reparación de daños, sin embargo, permanecerá privado de su libertad en el Cereso de León.

Roberto Pesquera Vargas fue denunciado penalmente en el año 2015 al encontrar vínculos con seis empresas fantasmas, las cuales no existían, pero prestaron servicios al Gobierno Municipal durante el period0 2012-2015, causando un daño al erario de casi 3 millones de pesos.

Al exfuncionario también se le acusa del desvío de recursos mediante un contrato que se realizó para la actualización del software Oper-Go que utilizaba la Tesorería para la administración de la cuenta pública, pese a darle un adelanto de 262 mil pesos a la empresa, ésta nunca ofreció el servicio; asimismo la organización fue contratada para la impartición de unos cursos de verano que nunca se acreditaron.