León, Guanajuato.- El 14 de junio se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre para agradecer a los voluntarios no remunerados y concientizar sobre la necesidad de esta práctica.
Así lo han hecho los estudiantes de la Universidad De La Salle Bajío, quienes a través del grupo estudiantil “Club 25” se unen a campañas de donación con la finalidad de ayudar a salvar vidas y además durante los últimos semestres, han informado también a la comunidad sobre estilos de vida saludables para poder donar para lograr 25 donaciones en promedio a lo largo de la vida de una persona.
¿Cómo surgió Club 25?
Club 25 nació en 1989 en Zimbabwe con la estrategia de “Compromiso 25” estableciendo un club de donantes, dándoles la prioridad a los jóvenes.
Durante este compromiso, se establecía que los miembros se comprometieran a realizar 25 donaciones de sangre después de egresar del colegio; poco a poco los clubes ayudaban a los jóvenes a hablar sobre sus experiencias con temas relacionados a un estilo de vida saludable; brindando materiales educativos para poder promocionar la donación de sangre segura.
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El concepto se empezó a difundir por África y posteriormente por otras partes del mundo como Filipinas, Indonesia, India, Haití, entre otros países.
En la universidad lasallista, durante el ciclo escolar 2014-2015, se optó por emprender este proyecto, en el que la comunidad pueda conocer más sobre hábitos sanos para poder ser voluntarios en esta noble labor, realizando charlas cada semestre sobre los mitos y verdades del tema.
“Durante este proyecto y alrededor de varios años, hemos trabajado con el Centro Estatal de Medicina Transfusional (CEMT) logrando realizar dos campañas de donaciones por año; todo esto gracias a la Vicerrectoría de Formación Integral, la Coordinación de Grupos Estudiantiles, el CEMT que nos ayudan a toda la elaboración, así como proporcionarnos las instalaciones, pero más que nada con el apoyo de toda la Comunidad Lasallista por su labor de querer donar sangre; ya que sin todas y todos ellos, esto no sería posible”, expresó Christian Emmanuel Fernández Peña, quien comparte la presidencia de Club 25 con Hannia Dánae Díaz Del Río.
El estudiante agregó que una de las experiencias que han tenido alrededor de las donaciones, las que más les emociona es cuando participan por primera vez.
“Cuando llegan personas en este supuesto, tratamos de hacerles la estancia amena, para que no se sientan estresados o asustados; después de que han logrado donar sangre, se han ido felices de vivir esta experiencia; y los hemos llegado a volver a ver en las donaciones posteriores”, comentó.
El reto de la pandemia
En el 2020, fue muy difícil para el Club, debido al confinamiento por la pandemia, pero afortunadamente lograron hacer una donación previamente; a pesar de que por tres semestres no se realizaron las campañas de donación, este Grupo Estudiantil dio un giro, pues realizaron en conjunto con el Grupo Felinos De La Salle, una campaña de donación de Electrolitos a personal de sector salud que estaban trabajando en primera línea con pacientes COVID- 19.
“Otro cambio que hicimos en el grupo, fue impartir platicas virtuales con ponentes expertos en la materia para poder promocionar un estilo de vida saludable, esto con la finalidad de que las personas pudieran animarse a ser unos #HéroesSinCapa, donando sangre”, manifestó Cristhian.
Ahora con el regreso presencial, se realizaron dos campañas, en conjunto del CEMT, en total Club 25 De La Salle, ha logrado realizar 12 campañas para donativos desde su fundación, una donación de Electrolitos al Sector Salud y una donación de cabello, realizada en mayo de este año en conjunto con la Academia de Belleza ATBEL y la institución Cabello Para el Alma, con la finalidad de elaborar pelucas para mujeres y niñas que han sido víctimas del cáncer.
Actualmente el club se encarga de ayudar a los pacientes que requieren de una trasfusión a difundir la información en redes sociales cuando están buscando donadores de sangre, de igual manera implementan una red de donadores, para poder ayudar a los pacientes a encontrar de manera más fácil a los voluntarios.