León, Guanajuato. - Cada 3 de junio se celebra el Día Mundial de la Bicicleta, con la finalidad de visibilizar la importancia de un medio de transporte ecológico, pero para Diego Armando Zenón Sánchez, esta actividad también le ha traído beneficios y experiencias que no imaginaba.
Esta efeméride se creó gracias a un decreto de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), proclamado en el año 2018.
El gusto por rodar nació a inicios de la pandemia, pues Diego buscaba una actividad física que le ayudara a aminorar problemas de salud relacionados con el sobrepeso.
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“De ahí pues realmente disfruto el hecho de estar recorriendo los caminos, escuchando música, hacer introspección porque es algo que me relaja mucho”, compartió.
Desde hace dos años lo hace cada vez que le es posible por sus actividades labores y personales, pero sí es seguro que, de tres a cuatro veces por semana, de lunes a viernes poco más de una hora y los fines de semana aprovecha para hacer recorridos largos de hasta dos horas y media.
“He notado muchos cambios: físicos, perdí bastante peso, llevo 18 kilos aproximadamente ha mejorado y ha mejorado mi calidad de vida, mi condición de salud; y emocionalmente, me ha dado más seguridad que me quede ropa que ya no usaba desde hace 10 años, esa parte es muy fuerte para mí para seguir practicando”, comentó.
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A veces lo practica solo y últimamente amigos o familiares se unen a la actividad, la cual disfruta más en paisajes naturales que urbanos.
“Me gusta más hacerlo en campo, disfrutar de los paisajes, caminos, áreas poco transitadas”
Además, lo combina con otra de sus grandes pasiones: la fotografía; y es que en ocasiones carga con su cámara para captar las maravillas de la naturaleza que recorre a través de su bicicleta, la cual también se vuelve “musa” de sus disparos.
“No conocía presas locales como La Laborcita, la de San Juan de Otates, la cascada de ahí también, la ruta de la mina de La Valenciana hasta el Cerro del Cubilete, o localidades por el lado de Ibarrilla como La Mesa o La Parada”, contó.
Eso sí en ese tipo de recorridos no puede faltar su equipo de seguridad para cualquier percance, pues sobre todo en vías urbanas no falta algún despistado que se atraviesa y que ha provocado un choque o una caída que, afortunadamente no ha pasado a mayores.
“En lo que he empezado a rodar las ciclo vías de la ciudad me parecen bien en vías de tránsito, optar por un medio de transporte secundario y a fin de cuentas beneficia al deportista el hecho de tener mayor condición y actividad física; en la parte ecológica que reduce el tráfico o la contaminación”, comentó.
Sin embargo, dice que hay áreas de oportunidad en estas vialidades, pero considera que van por buen camino.
“Cuando tengan tiempo háganlo es una buena actividad, cualquier deporte, que los mantenga en buena condición física y que se ocupen en algo productivo. Una felicitación a quienes se dedican a este deporte y hacerlo con seguridad porque vivimos tiempos difíciles y hay que estar siempre alerta y a recorrer buenas experiencias”, finalizó.