León, Gto.- La crisis hídrica que se vive en el estado de Guanajuato ha llevado a las personas dedicadas al agro a buscar opciones para ser más productivos para tener más ganancias en sus parcelas.
En los últimos años se ha registrado un boom en la siembra del agave en Guanajuato, debido a la vecindad que se tiene con Jalisco, alto consumidor de la planta y también porque las tierras son consideradas igual de importantes que las del municipio de Tequila, ofreciendo un producto de calidad a los productores de este licor.
Sin embargo, en el estado de Guanajuato los productores del campo también han encontrado en la siembra de uva un producto rentable, lo cual ha ocasionado que crezca la siembra de hectáreas de la vid, que entregan un producto de calidad, el cual tampoco requiere tanta agua como el agave.
La siembra de uva, al igual que el agave, tarda cinco años, aproximadamente, en dar el fruto para la producción del vino, pero año con año crece el número de productores y de hectáreas cultivadas.
Elías Torres Barrera, presidente de la Asociación de Uva y Vino en Guanajuato, declaró a Organización Editorial Mexicana que actualmente no hay una competencia directa entre la siembra de agave y la uva, pues van a mercados completamente distintos y reconoció que la industria del tequila sigue estando en los paladares de los consumidores nacionales e internacionales, mientras que el vino de mesa de Guanajuato apenas va en ascenso.
En cuanto a las tierras, destacó que tampoco existe una competencia entre los productores, debido a que la tierra de productores, que antes se dedicaban a la siembra de hortalizas, ahora se están diversificando y uno de sus cultivos es la siembra de la uva.
Guanajuato es el cuarto lugar en producción de vino en el país y este año espera cerrar con más de 600 hectáreas sembradas y llegar a producir más de un millón 800 mil botellas para el próximo año.
“Se tiene un potencial muy grande de crecimiento en Guanajuato, se ha identificado que en el estado existen más de 10 mil hectáreas de tierra disponibles con climas favorables para el cultivo de la vid, incluso la ciudad de León, cuenta con un tipo de suelo y un clima propicio para el cultivo de la uva”, explicó Elías Torres Barrera.
Negocio rentable
El presidente de la Asociación de Uva y Vino en Guanajuato explicó que aunque pareciera que es un proceso costoso y la inversión es a largo plazo, se prorratea con el vino que se produce, la cadena de producción de vino es larga, por lo menos a cuatro años y los productores requieren apoyos del gobierno e incentivos fiscales para para soportar el largo tiempo.
“Pero estamos en un lugar privilegiado, debido a las tierras que se tienen en Guanajuato, además de que la vid es más sustentable y ocupa poca agua en comparación con otros cultivos, una alternativa en esta temporada de sequía y de calor ayuda al ahorro del agua. Toda la vitivinícola en el estado de Guanajuato está tecnificada por goteo y requiere seguir implementando técnicas de riego nuevas para seguir ahorrando aún más agua en los viñedos”, explicó.
Por ello, reiteró que está prácticamente tecnificada en 100% el área de los viñedos, “ya que producir uva actualmente sin un sistema de riego es prácticamente imposible en Guanajuato”.
Industria en apogeo
En Guanajuato, la industria genera más de tres mil 500 empleos directos en el estado y otra cantidad importante de empleos indirectos.
“La industria es integradora, donde hay un viñedo se acerca a la gente para estar en contacto con la vid y quiere aprender del importante mundo del vino que se tiene en Guanajuato”, explicó Elías Barrera.
Las ciudades más productoras de vino en Guanajuato son San Miguel, Dolores Hidalgo y ahora se suma San Felipe.
El cultivo es a largo plazo, la planta, a los primeros cuatro años, da fruto y luego se produce el vino y dependiendo del proceso que se le dé, se pueden llevar otros dos años más.
“Es una industria a largo plazo, pero estamos contentos porque se arrancó en Guanajuato con nueve proyectos y actualmente ya se encuentran 45 proyectos, eso nos da pauta para seguir creciendo aún más, ya se ha crecido mucho de una manera organizada”.
El 70% de la producción de Guanajuato se consume en el país y el 30% se va al extranjero. Algunas bodegas están exportando, principalmente a los Estados Unidos, donde se ha tenido una muy buena aceptación. Aunado a ello, se han ganado concursos a nivel internacional, porque la calidad del vino es buena en Guanajuato y eso nos posiciona como una entidad que produce vinos de gran calidad.
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Por si fuera poco, la uva de Guanajuato no es tan ácida, es de gran calidad y sirve para crear grandes vinos, por lo cual el estado está en vías de buscar ser una potencia en producción de vino a nivel nacional.