El barrio tiene identidad propia, los jóvenes que habitan en el Coecillo firman con aerosol sus crews y los nombres de los artistas, además muestran de una manera original las tradiciones que se viven en la ciudad.
Al adentrarte en el Barrio del Coecillo podrás conocer de su gente a través de sus murales, las paredes hablan, expresan creatividad, por ejemplo se puede observar desde un “acuario” plasmado en una barda de más de 50 metros de ancho una ballena, pulpo, tiburón y otros animales marinos.
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Dicho expresión se ubica sobre la calle Bosque y Candelaria, según los vecinos fue pintado hace 10 años y se desconoce su autor.
En un recorrido realizado por El Sol de León, se pudo observar que sobre las calles hay diversos murales que de acuerdo a sus habitantes, los jóvenes los han pintado para demostrar su talento innato asimismo en muchos de ellos carecen de autor y llevan pintados más de 10 años.
Esto cuentan los murales
Otro mural sobre la calle Bosque está relacionado con una película, dicen que los artistas pidieron permiso para decorar la barda con la temática de una película, este dice que el autor es Fer.
En la calle San Blas plasmaron un hombre que es sostenido por un elefante rosa, que a su vez van volando por la ciudad, está enmarcado por un fondo en color verde, de este mural se desconoce de dónde surgió la idea.
También hay murales que son para recordar y para clamar justicia así como crear consciencia sobre el consumo de las sustancias ilícitas, en una escuela ubicada en la calle San pedrito, pero perteneciente a la colonia la Carmona, hay un mural dedicado los jóvenes pues tiene frases como “No dejes que te atrape el delito”, “El mundo está en tus manos”, “No a las drogas”, “Que no te atrapen” y “Stop al bullying”, acompañado con imágenes de rostros de niños y personajes de caricaturas.
Este tipo de concepto se visualiza sobre una casa en el bulevar Adolfo López Mateos en el cual está pintada una joven con la mano arriba en forma de protesta, alrededor hay unas abejas.
A decir de Eva Gutiérrez, dueña de la casa, la barda fue intervenida por una joven de la Universidad de Guanajuato que a través del Instituto de la Juventud pidió el apoyo para hacer un mural en forma de protesta por los feminicidios.
“El Instituto de la Juventud nos ha pedido permiso para pintar la barda, ha hecho dos murales pero esté lo pintó una estudiante que llegó de la Universidad de Guanajuato porque en ese tiempo mataron una jovencita de su escuela”, dijo.
“En el mural hay una mujer, tiene la mano levantada y alrededor hay abejas. Dijo la chava que vino que es en memoria de una compañerita de la escuela”.
En cambio, en la calle Españita esquina con Malecón se encuentra una pareja de danzoneros en el Jardín San Juan del Coecillo. Todos los viernes se juntan parejas a mostrar sus mejores pasos de baile.
Otros de los murales que resaltan son letras donde se juntan “Los Chayos” ya que con letras coloridas resaltan sus bordes, en el mercado San Francisco hay un mural muy bonito inspirado en las mujeres del hogar que todos los días acuden a comprar su mandado y en el bulevar Valtierra hay otro que estampa como es la vida en el Coecillo: música, arte y libre expresión.
De acuerdo a Alfredo Fuentes, reportero de El Sol de México, el 64 por ciento de las personas se sienten inseguras en las calles que frecuentan pero su percepción mejora hasta nueve por ciento con el arte callejero.
También explica que existe un programa impulsado por Comex para apoyar a los muralistas con rodillos y brochas y así cambiar la realidad de un entorno.
Cabe señalar que en El Coecillo, la mayoría de los murales está hecho con por las manos de sus jóvenes habitantes y que a decir de sus vecinos, son ellos mismos quienes pagan su material únicamente para mostrar su talento.