León, Gto.- El municipio de San Francisco del Rincón no cuenta con dinero y estructura para retirar la montaña de cromo hexavalente que se encuentra ubicada en las instalaciones de la empresa Química Central de México S.A. de C.V.
Así lo dijo, Alejandro Antonio Marún González, alcalde de dicho municipio, mismo que reveló que el tema se quedó estancado a nivel federal, debido a que no hay quien dé la cara por la contaminación porque los dueños se fugaron y no hay responsables de lo sucedido.
➡ Suscríbete a nuestra edición digital
“Es un tema federal, pero estamos haciendo presión. Nos juntamos con la SMAOT -Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial de Guanajuato-, para retirar el cromo hexavalente que está en la zona, sin embargo, es una exageración de dinero que se requiere para poder extraer”, comentó el alcalde.
En total son 340 mil toneladas de residuos tóxicos, aunque la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), indicó que son 300 mil toneladas situadas en las instalaciones de la empresa y las restantes están enterradas en un derecho de vía de ferrocarriles localizado a 1.5 kilómetros de la planta.
Marún González, destacó que desde que llegó a la alcaldía el recogimiento del cromo es prioridad e hizo hincapié que junto con la diputada federal Karen Michel González Márquez, han buscado la manera de darle solución al problema que data de años, pero que fue clausurada el pasado 4 de junio de 2014 resultante de las diversas violaciones de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos.
El alcalde de San Francisco del Rincón informó que no ha habido denuncias de manera directa sobre las afectaciones, lo que sí es un hecho es que se desvalijaron láminas de estructuras para ser vendidas a pesar del riesgo radiactivo.
En este sentido, se desconoce el costo que genere el retiro del cromo por lo que buscan acercamiento con las autoridades federales, además, se desconoce cómo se trasladará a la zona norte del país.
Cabe mencionar que los residuos peligrosos sobrepasan los límites máximos permisibles en relación a metales, sobre todo en cromo, este último es absorbido por la tierra y más en temporada de lluvia y está ocasionando daños en el manto freático.
De acuerdo a Profepa, la empresa Química Central se dedicaba a la fabricación de productos químicos básicos (sulfato básico de cromo, líquido y sólido y dicromato de sodio).