León, Gto.- La pandemia ha representado tocar fondo para muchas personas que viven de difundir la cultura y el arte, para otros como Héctor Gallardo “el organillero” de León representa el jugársela en la cuerda floja para poder acercar algo de dinero para los gastos de casa y la alimentación de los hijos.
Héctor recuerda que a mediados del mes de marzo ya era poca la gente que pasaba por la zona peatonal, luego vino el cierre y “abandoné el instrumento”, para convertirse en ayudante de una verdulería y frutería, en donde solo obtuve productos a punto de la descomposición “no había más”, por mi edad no había en donde en donde más trabajar, comentó.
“Desde hace 20 días acudo a la calle 5 de Mayo, con la esperanza que salga algo, pero la gente no tiene dinero y si bien me va alcanzo a juntar los 150 pesos que me sirven para comprar pastas, frijoles, leche para comer en casa, y los gastos de casa bueno ese ya es otro detalle” plática el amigo organillero que deja escuchar sus notas en busca de una moneda.
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Me han pedido para el camión
Héctor Gallardo, recuerda tener muy presente en la mente, el momento cuando a él se han acercado personas para pedirle unas monedas para completar el pasaje del camión, es aquí cuando entendemos lo difícil del tema financiero en las familias “yo lo hago de corazón, algunos regresan y me dan el doble otros no, lo importante es la intención de poder ayudar”.
Abandonan el arte y la música
El músico leonés nacido en el barrio de San Miguel, narra haber platicado con muchas personas que se ayudaban de tocar instrumentos musicales en el Centro Histórico y que ya no lo hacen primero por tema de prevención y segundo en donde lo harán, pues no hay espacios, de por sí ya es difícil estar en calle, lo que ha representado para muchos el tocar fondo, mientras que otros nos la jugamos.
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En mi espalda viene una historia de 54 años y tres generaciones de organilleros leoneses por convicción, desde la llegada de mi abuelo, padre y ahora yo, que no me rindo y busco ganar algunas monedas y mantener vivo en la historia de mi ciudad, estado y país el organillero, y como dice la canción “arranca pedazos de mi alma”.