Los obispos del país, incluido el de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, hicieron un llamado al gobierno federal para analizar a fondo las estrategias de seguridad y corregir aquellas que no están funcionando, esto ante los altos niveles de violencia que se viven en el país.
A través de un comunicado, la Conferencia del Episcopado Mexicano señaló que es necesario escuchar a la ciudadanía, pues han sido varias las voces que han alertado que la estrategia de seguridad no está funcionando y que es momento de corregirla.
“Ante la gravedad de los hechos, hacemos un llamado al Gobierno Federal y a los distintos niveles de autoridades (…) es tiempo de revisar las estrategias de seguridad que están fracasando. Es tiempo de escuchar a la ciudadanía, a las voces de miles de familiares de las víctimas, de asesinados y desaparecidos, a los cuerpos policíacos maltratados por el crimen. Es tiempo de escuchar a los académicos e investigadores, a las denuncias de los medios de comunicación, a todas las fuerzas políticas, a la sociedad civil y a las asociaciones religiosas. Creemos que no es útil negar y tampoco culpar a tiempos pasados de los que nos toca resolver ahora”, dice el comunicado emitido por la Iglesia.
La CEM consideró que lo acontecido en Chihuahua, en donde dos sacerdotes fueron asesinados, “no es más que una muestra de la falta de valores y sensibilidad a la que se ha llegado, perdiendo todo respeto a la dignidad humana”.
Además, reconocieron que como Iglesia aún hace falta mucho trabajo para lograr una verdadera recomposición social, por lo que los obispos reafirmaron que redoblarán los trabajos para desde la labor pastoral, en vías de lograr impulsar una cultura de paz.
Por ello, convocaron a un diálogo nacional “para emprender acciones inteligentes e integrales con el fin de alcanzar la paz de manera conjunta”.
“Creemos que la paz es posible, que tiene que ser posible. En esta tarea todos los ciudadanos de buena voluntad podemos ser aliados. ¡No perdamos esta oportunidad”, finaliza el comunicado conjunto.