León, Gto.- Hace 11 meses un elemento de la Policía Vial de León fue brutalmente golpeado por tres hombres, luego de que el oficial les levantó una infracción por tener una camioneta arriba de la banqueta. La madrugada de este lunes lo volvieron a agredir. En ninguna de las dos ocasiones portaba arma de fuego para defenderse.
De acuerdo al reporte oficial de la Secretaría de Seguridad Pública de León, los hechos se registraron a las 4.47 horas de la madrugada en la calle Miguel Hidalgo esquina con Alcaraz de la colonia Fracciones de San Carlos en el sur de la ciudad.
El parte informa que tras intentar realizar una infracción, el oficial fue agredido y recibió golpes contusos en el rostro y fue trasladado a un hospital para recibir atención médica.
Tras los hechos, dos personas de nombre Sandra y Luis fueron detenidos y puestos a disposición de las autoridades. Además, un vehículo fue asegurado.
Momentos después trascendió que al parecer la mujer iba en estado de ebriedad y al intentar ser infraccionada, reaccionó de manera violenta y aventó una piedra contra el oficial y posteriormente fue agredido por más personas, pero esto no ha sido confirmado de manera oficial.
Reiteradas agresiones a policías viales en León: una crisis de seguridad
Compañeros del agredido aseguraron que la víctima, como otros oficiales, no cuentan con armas y eso los hace exponerse más, pues solo cuentan con un silbato para enfrentar este tipo de situaciones.
Incluso fue en diciembre del año pasado, cuando el mismo policía fue mandado al hospital luego de recibir una golpiza por parte de tres hombres en la colonia La Ermita. Esa ocasión tampoco estaba armado, aunque los altos mandos le prometieron que ya se le iba a entregar una pistola para hacer frente a la delincuencia. Sin embargo, hasta la madrugada de este lunes seguía “en la guerra sin fusil”.
Además, los elementos que denunciaron la situación desde el anonimato aseguran que entre más pasa el tiempo el déficit de elementos es peor y que hay ocasiones en las que solo cuatro patrulleros rondan en un solo sector, lo que los hace más vulnerables a las situaciones que se enfrentan en todo momento durante sus horas de trabajo.