León, Gto.- En las áridas tierras de Guanajuato se gesta un proyecto cinematográfico que promete capturar la esencia de la región. "El Diablo Fuma (y guarda las cabezas de los cerillos quemados en la misma caja)", un largometraje dirigido por el mexicano Ernesto Martínez Bucio, ha elegido como escenario no solo la bulliciosa Ciudad de México, sino también los estados de Guanajuato y Jalisco.
Carlos Hernández, orgulloso oriundo de Celaya, Gto., se erige como el productor detrás de esta obra cinematográfica. Hernández, también socio fundador de Mandarina Cine, una empresa dedicada a la producción y distribución de cine independiente en México, ha llevado parte del rodaje a su ciudad natal, Celaya, contribuyendo así a la materialización de este proyecto ambicioso.
La trama de la película se teje alrededor de cinco hermanos, de edades comprendidas entre los 8 y 14 años, quienes, tras ser abandonados por sus padres, se ven a merced de su abuela. Esta anciana, desconfiada de los extraños, asegura tener encuentros con el diablo. Una historia intrigante que promete explorar los recovecos de la familia y la confianza en medio de circunstancias adversas.
Martínez Bucio, director debutante en largometrajes tras destacados cortometrajes como "Las razones del mundo", se asoció con Karen Plata Luna para dar vida al guion de esta película. La dirección de fotografía, a cargo de Odei Zabaleta, revela un enfoque único: el equipo optó por otorgar libertad a los jóvenes actores, permitiéndoles interpretar los conflictos de cada escena a su manera.
En palabras del director: "Queremos una película fraccionada, con planos cercanos que capturen solo partes, nunca el todo. Esto crea huecos, vacíos narrativos que el espectador deberá completar."
La cámara, siguiendo las acciones espontáneas de los niños, se convierte en testigo de la autenticidad de sus reacciones ante estímulos ficticios. Martínez Bucio enfatiza la rugosidad y aspereza en la textura de la imagen, una elección estilística que define la película como trazada "con brocha gorda, no con pincel".
La culminación de este proyecto cinematográfico está programada para la segunda mitad del próximo año, un hito que se espera con anticipación tanto en la industria como entre los cinéfilos. Además, "El Diablo Fuma" ya ha sido reconocido por el Fondo Fílmico Gabriel Figueroa en 2022, siendo seleccionado para su espacio de Cine en Desarrollo.
El respaldo de entidades como EFICINE y FIDECINE, así como su participación en EAVE Puentes en 2021, añaden capas de legitimidad y apoyo a esta película que promete dejar una huella en el cine mexicano.