León, Gto.- El padre Enrique Mascorro López, misionero claretiano y rector del Templo del Inmaculado Corazón de María, celebró la santa misa en honor de San Antonio María Claret, en el templo del Inmaculado Corazón de María ubicado en la calle 20 de Enero.
En su mensaje, dijo que imitando a San Antonio María Claret se debe dejar que la voz del Señor resuene con la frase “El Señor es mi pastor, nada me falta” y creer en Dios y confiar plenamente en él.
“En estos 175 años de la fundación y el espíritu de este gran sueño sigue presente en más de 65 países que hacen eco para celebrar a Dios de la vocación de San Antonio Claret”, comentó.
Una vez termina la celebración eucarística, los devotos se acercaron recibir la bendición del padre Enrique y al final realizaron un convivio en el patio ubicado a un de la iglesia, además, las y los ministros le cantaron las mañanitas y alabanzas tanto al padre Enrique como a San Antonio María Claret.
A este santo se le pide la fuerza del espíritu para que sea testigo de Cristo entre los hombres y sientan la alegría de ser hijo de Dios en la comunión fraterna de tu Iglesia.
Claret, defendió la dignidad de los esclavos, fundó Cajas de Ahorros para campesinos y bibliotecas populares, creó una granja-escuela para niños y en 1855 junto con la Madre Antonia París fundó la Congregación de Religiosas de María Inmaculada Misioneras para la educación de las niñas, entre otras muchas labores.
Es de mencionar que en el bautismo se le impuso el nombre de Antonio, pero en 1850, al ser consagrado obispo, añadiría a ese nombre el de María, porque decía: “María Santísima es mi madre, mi madrina, mi maestra, mi directora y mi todo después de Jesús”.
A pesar de que Antonio María Claret es considerado el patrono de los trabajadores textiles, sus celebraciones no se ven reflejadas por peregrinación por parte de personas que trabajan en este sector, sin embargo, poco a poco se ha dado a conocer esta congregación.