León, Gto.- El Miércoles de ceniza comenzará el sábado 13 de febrero con la disposición de ella en todos los templos para que el rito de la imposición se lleve a cabo en cualquier lugar, el día 17.

Así lo dio a conocer la arquidiócesis de León, en una circular firmada por el arzobispo Alfonso Cortés Contreras, quien privilegia el cuidado de la salud, evitando aglomeraciones el día 17 de febrero, inicio de la Cuaresma.

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"Para lograr este cuidado, como Iglesia proponemos la observancia de una acción esencial, acción que se ha de vivir desde casa, en familia, o desde el lugar de trabajo, pero como una forma especial de gracia", dijo Cortés Contreras.

Por lo que pidió a párrocos y rectores "que prevean la bendición de la ceniza para este próximo fin semana y dispongan todo para que los fieles puedan recogerla y llevarla a sus hogares o lugares de trabajo. Así, la ceniza bendecida deberá estar disponible en nuestros templos desde el día sábado 13 de febrero al miércoles de ceniza".

El jerarca de la Iglesia católica en León indicó que la Comisión Pastoral Litúrgica ha preparado un subsidio, para que desde casa, se pueda realizar dicho y "así, todos nos adentremos en este espíritu cuaresmal, con la esperanza de crear y favorecer estructuras de cuidado y atención, especialmente para los más necesitados, y en este tiempo particularmente a nuestros hermanos enfermos, para que todos podamos aceptar y vivir el don de la paz que solamente Cristo resucitado nos puede ofrecer".

En el mensaje previo al comienzo de la Cuaresma, el prelado señaló que "en medio de las tempestades que han azotado nuestra vida, nos aproximamos a vivir un tiempo de gracia, que debe ser la oportunidad para entrar en la presencia de quel que nos ama y en el silencio quiere hablarnos al corazón".

Agregó que "las dificultades que nos está tocando vivir por causa de la presente pandemia de Covid-19 nos recuerdan la necesidad que tenemos de convertirnos al Señor. Recibir este tiempo de Cuaresma es la oportunidad que el Señor nos da para ajustar nuestra vida, tanto personal

como socialmente, es un llamado a la responsabilidad para con nosotros mismos en el cuidado de nuestra salud y la de los demás".

"Es precisamente con la imposición de ceniza que iniciamos el tiempo de Cuaresma, con el deseo de purificar el alma, purificación que permitirá la realización de las buenas obras

encaminadas a la oración y, en estos tiempos de pandemia, el cuidado de la salud mediante la obediencia y responsabilidad", finalizó.

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