“Sé muy bien lo que esto implica y estoy dispuesto a aceptar las consecuencias”, fueron las palabras del presidente municipal de León, Héctor López Santillana, referente a la aprobación del acuerdo para incrementar un peso más a la cuota del transporte público.

Cuando se le cuestionó al alcalde sobre el “costo político” que podría representar el hecho de no cumplir su promesa de campaña de no incrementar la cuota del transporte público durante su segunda administración, dijo que ya sabía las consecuencias, pues ya las había vivido.

Sin embargo, dijo, que no habrá pauta para que los concesionarios no cumplan con los acuerdos previamente establecidos, pues en caso de ser así, habrá sanciones y de ser necesario se les revocará la concesión.

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Que quede claro, este ajuste, no es un cheque en blanco, las exigencias ciudadanas se transformaron en compromisos que se van a cumplir porque lo que sí es viable es que si alguna empresa no cumple se le sancionará y si persiste se podrían llegar a recovar la concesión

Dijo que la decisión se debe a un análisis que realizaron de manera puntual y precisa, pues hasta se estudió la posibilidad de subsidiar por parte del Municipio el incremento a la cuota del trasporte, pero que no fue una opción viable, por lo que optaron por el incremento.

De frente, sin demagogia, sin falsos discursos y bajo ningún tinte político, con espíritu abierto, realizamos un análisis responsable, exploramos todas las posibilidades y reflexionamos todas las posturas, sobre todo las de los usuarios, analizamos diferentes alternativas, la municipalización del servicio del transporte público, la posibilidad de subsidiar la tarifa, ambas actualmente en estos momentos resultan inviables