León, Gto. En el marco de las celebraciones a la Virgen Santísima de la Luz, feligreses se reunieron en la plaza principal de la ciudad de León, a la última misa en honor a la Virgen y para pedir un buen temporal.
Fue en punto de las 6:00 de la tarde, en que la celebración eucarística se realizó frente a un jardín lleno de personas, misma que fue precedida por el vicario general, Juan Rodríguez Alba.
"Estamos a tiempo de una gran conversión, una gran evangelización. Porque si no luego lo de la sequía va a quedar corto, nos atraemos cosas peores. Hoy le venimos a pedir eso, ayúdanos, bendícenos con la lluvia, pero sobre todo bendícenos primero con la gracia de la conversión, que volvamos a tener unidad en las familias, que volvamos nosotros a adorar al santísimo, que volvamos a vivir una vida de oración, fieles a su voluntad en una palabra", comentó Rodríguez Alba.
Además, durante la misa se pidió que las personas sean honestas y hagan lo correcto, esto como un reflejo de lo que es ser un verdadero cristiano.
"Ella (la virgen) sabe que tenemos necesidad de la lluvia, sabe que tenemos necesidad nosotros de ser más fieles a la voluntad de Dios, eso es lo que hay que pedirle. Sabe que tenemos nosotros necesidad también de pastores, según el corazón de Cristo, sabe que tenemos nosotros necesidad de gobernantes generosos, totalmente fieles al servicio del pueblo, sabe que tenemos necesidad de maestros; pero que enseñen a las personas a ser personas íntegras. Sabe que tenemos necesidad de grandes profesionistas, tenemos necesidad de seres humanos íntegros, de cristianos. Decidimos hoy nosotros, de convicción, de hueso colorado. Es lo que le pedimos a ella, y además que nos mandé el don de la lluvia", recalcó.
También enseñando que la mejor forma de pedirle es dar gracias, ya que desde hace casi 300 años la Virgen Santísima de la luz ha estado presente en la ciudad de León. Además, recalcó momentos importantes de la ciudad donde el milagro de la madre santísima se hizo presente, tal como es el caso de la enfermedad de cólera que llegó a la Villa de León en 1833, donde los panteones fueron insuficientes ante tantos decesos.
"En 1833 ya estaba despoblándose por el cólera, si no hubiera sido por la intercesión de la Virgen, la Villa o la ciudad, que ya era ciudad, se hubiera acabado. Por eso le damos gracias, ha estado siempre con nosotros, nos ha tenido una gran paciencia, nos ha llorado mucho porque nos alejamos del señor, nos ha llorado mucho y sigue llorando", mencionó Pbro. Juan Rodríguez Alba.
"Por eso ella (la virgen) quiere que nos acerquemos y nos vendrá, no solo la lluvia y el agua, los otros remedios de todas las necesidades que tenemos, que son mucho más grandes que la lluvia, que así sea, amén", finalizó durante el sermón.
Fue el pasado sábado 11 de mayo, en punto de las 10:00 de la mañana en que el Arzobispo Alfonso Cortés presidió la congregación religiosa en el Parque Metropolitano, también conocido como la Presa del Palote.
Más de mil 500 personas se dieron cita para pedir con la misa "Por un Buen Temporal" que termine la crisis hídrica en la que se vive actualmente. Además, durante el evento se recaudaron kilos de maíz quebrado, esto con la finalidad de apoyar al albergue temporal donde actualmente se encuentran las aves que vivían en las inmediaciones de la presa.
Es la primera ocasión que la presa es sede de esta misa, ya que fue hace 12 años, dando inicio del mes de mayo, llegaron más de 1 mil leoneses a la misa que se organizó a las seis de la tarde junto a las ruinas del granero. Monseñor Martín Rábago pidió a todos los devotos que pidieran con fe que llegarán lluvias en la entidad.