Ya no compran imágenes religiosas

El señor de 82 años todos los días llega a diferentes colonias de la ciudad a trabajar para sacar dinero y comprar los medicamentos de su hija

Rosario Horta / El Sol de León

  · jueves 16 de mayo de 2024

Héctor Ramírez, padre que ve por el bienestar de su hija / Fotos: Francisco Carmona / El Sol de León

León, Gto.- Héctor Ramírez de 82 años de edad todos los días se levanta a las seis de la mañana para salir a vender sus imágenes religiosas en las calles de la ciudad pero casi nadie le compra porque su economía no se los permite.

El señor de la tercera edad platicó que tiene que salir a buscar el sustento debido a que su hija, quien es con la vive, a causa de la diabetes perdió la visión y ahora no puede ni salir a trabajar.

A sus más de 80 años y con el sol sobre su rostro carga una cruz de más 1 metro de altura, misma que tiene un precio de 2 mil pesos.

Cortesía

Manifestó que hay personas de buen corazón que le han regalado medicamento pero lo que más ocupa es la insulina que tiene un costo desde 400 pesos hasta más de 1 mil pesos.

Mi papá Dios me dio todas las fuerzas para salir adelante, te puedo decir que no me duele ni un hueso y ni cansado me siento, dijo el señor con una gran sonrisa.

Don Héctor, vive solo con su hija y su sustento depende de sus ventas así como del apoyo de Bienestar de Adultos Mayores, ya que ella por no considerarse una discapacidad le quitaron el apoyo que tanto necesita y que le hace falta para sobrevivir.

También platicó que cuando el sol está en todo su esplendor hay quienes le regalan un vaso de agua al ver al señor expuesto a las altas temperaturas.

Ya dando las seis de la tarde pasó un camión que lo traslada Puruándiro, Michoacán de donde es originario para llegar con algo de dinero y así pueda comer él y su hija.


Mientras platicaba su rostro se le iluminaba al decir que no tuvo estudios pero que su padre siempre le enseñó a ser educado.

El dinero no tiene que ver con la educación y mi padre me educó bien, por eso voy de puerta en puerta vendiendo los cristos hechos en Ciudad de México para ayudarme con mis gastos y los gastos de mi hija, indicó.

Finalmente explicó que siempre se ha mantenido sano y fuerte debido a que cada día lo vive con ilusión y eso es lo que mantiene de pie para seguir luchando cada día.

Foto: Cortesía / Facebook