GUANAJUATO, Gto.- El olor a la flor de Cempasúchil, uno de los elementos más representativos de las ofrendas para los muertos, inunda los alrededores de la histórica explanada de la Alhóndiga de Granaditas, lugar donde se prepara para uno de los conciertos de mayor expectación entre el público en el marco de la 50 edición del Festival Internacional Cervantino.
El exterior del recinto ya refleja un importante número de personas, quienes aguardan de pie para ser parte del evento musical que el grupo conformado por Rubén Albarrán (voz principal y guitarra rítmica), Emmanuel del Real (teclados y coros), Joselo Rangel (guitarra) y Quique Rangel (bajo y contrabajo) han preparado junto con la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato en la también Fiesta del Espíritu.
El color negro que predomina en el escenario, poco a poco es cubierto por la flor de originaria de México, cuyo nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl” que significa “veinte flores” o “varias flores”.
En el costado del recinto, sombrillas de todos colores adornan el paisaje, el inclemente sol que a las 5 de la tarde de este sábado se tiene aún quema, y personas de todas las edades deben cubrirse.
➡ Suscríbete a nuestra edición digital
Muchos son los que no cuentan con un boleto para entrar al espacio de gradas de la Alhóndiga, sin embargo, han decidido postrarse en sus alrededores para ser partícipes del evento musical.
Otros más, y afortunados por disponer de uno de los lugares privilegiados, también han formado la fila de personas para que en cuanto se autorice la entrada ser de los primeros en entrar.
Los celulares y cámaras fotográficas apenas se observan, pues, aunque disfrutan del ensayo previo al concierto estelar, muchos han preferido reservar la batería para que caída la noche logren obtener sus mejores postales.