La senadora Citlali Hernández Mora alertó que el atentado del que fue víctima la semana pasada no fue contra, sino contra uno de los poderes del Estado y no se puede tomar como una broma.
“Yo en lo personal creo que ningún tipo de incidentes como estos son una broma, y por supuesto que, más allá de una acción directa contra mí, son una especie de atentado contra uno de los poderes del Estado”, comentó en conferencia de prensa.
En torno a los rumores sobre un supuesto atentado, respondió que es una persona honesta y no realizaría ningún tipo de acciones de ese tipo, pero “todo mundo está en la libertad y derecho de interpretar lo que sea, pedimos que no se especule”.
Descartó que el ataque haya sido orquestado por algún partido político, de quienes, dijo, ha recibido su apoyo y solidaridad, pero pidió que no se descarte ninguna de las líneas de investigación.
Relató que el paquete ya llevaba dos días en su oficina y contenía una nota de un anónimo que reconocía su trabajo. Tomó de casualidad el libro, “porque normalmente yo no abro la correspondencia”, en ese momento explotó y alcanzó a reaccionar.
Comentó que no se trataba precisamente de una bomba, pero en efecto, era un libro que contenía explosivos en su interior, el cual, junto con su ropa ya están siendo revisados por la Fiscalía General de la República.
El explosivo detonó entre las 18:50 y 19:00 horas en el escritorio de su oficina, en seguida fue trasladada a la unidad de servicios médicos de la Cámara Alta y después la remitieron al hospital de La Raza, para descartar algún riesgo toxicológico o quemaduras.
Desde ese día no ha regresado a su oficina y anticipó que se reforzarán los mecanismos de seguridad en general en las oficinas del Senado, para fortalecer la seguridad de todo el personal.
Descartó tener miedo, pues aseguró que no tiene enemigos y continuará su labor como siempre, sólo con más precauciones.
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