León, Gto.- La familia Medina Alvarado fue la última en localizar un lugar para pasar la noche, esto debido a que fue difícil conseguir un poco de dinero para pagar el depósito de la próxima renta.
Todo se generó presuntamente tras un problema entre la dueña del inmueble y el cobrador de la renta, problema que terminó en el desalojo de 25 familias en el corazón de la ciudad zapatera.
Hoy en día el panorama es diferente, las diferentes familias encontraron un lugar donde dormir y dónde llevar sus muchas o pocas pertenencias que les quedaron, incluso las personas mayores de edad, lograron encontrar un techo donde pasar la noche.
En el lugar quedó una pila de muebles que resultaron dañados en el desalojo, por lo que se consideraron pérdida total, dejando a muchos de los dueños sin muebles, por lo que tendrán que empezar de cero nuevamente.
Mariana, integrante de la familia Medina Alvarado, platicó con Noticias Vespertinas que hoy por la tarde personal de la Presidencia Municipal, Protección Civil y del DIF, se acercaron a ellos y les brindaron ayuda para transportar sus pertenencias hasta su nuevo hogar, sin cobrar ni un solo peso.
"Pasé la noche con poquito de batalladera, porque nunca pensé que iba a pasar esto. Incluso a mí me hablaron, yo estaba en mi trabajo y ya cuando llegué encontré todas las cosas afuera, encontré a mis niñas en la calle y pues viendo cómo sacaban las cosas de mi mamá", mencionó.
Ella señaló que tenía desde el pasado fin de semana que pagó la renta con algunas semanas de adelantado, dinero que solicitó de regreso y nunca vio, puesto que Mario, quien se encargaba de cobrar, no ha dado la cara a los inquilinos.
"No sé ponen a pensar que tenemos niños de 7 meses, una de un año, cuando menos que nos regresen lo que pagamos para poder movernos en un lugar fijo; yo acababa de pagar entre el sábado y domingo, todavía había pagado un poquito más. Hacíamos también lo del aseo, también se lo cobraba con lo de la renta", comentó.
LOS NIÑOS PASARON LA NOCHE CON LOS VECINOS
Afortunadamente, algunos vecinos ofrecieron sus departamentos y algunas viviendas para que los niños no pasaran la noche en la calle, pero los adultos tuvieron que aguantar dormir a la intemperie para cuidar sus pertenencias que se encontraban en la vialidad.
"Gracias a dios encontramos en dónde porque si se me va a hacer complicado a mí, está lejos porque supuestamente es más para allá de La Joya. El kinder me queda aquí en San Juan de Dios y dónde yo trabajo es todavía más para allá de la feria", mencionó Mariana.