Noé Fabian N., permanecerá 20 años en prisión, luego de hacer arder con alcohol a su hijo al interior de una iglesia en la colonia Las Hilamas, el pasado domingo 27 de enero; días después el menor falleció.

Esa noche la estación de Bomberos, recibió el reporte de un sujeto en estado de ebriedad junto con su hijo menor de 5 años, la llamada refería que el progenitor y parricida, le roció el líquido inflamable y sin más le prendió fuego a su vástago.

El trabajo de investigación dio inicio la misma noche de ocurrido el crimen con parentesco, cuando se conoció que al interior de la iglesia ubicada en la colonia Las Hilamas, un hombre y su menor hijo de 5 años de edad, habían resultado lesionados por quemaduras, además se indicaba que el que el niño había sido arrojado por su padre al suelo, lo que le provocó un traumatismo de cráneo; ambos fueron llevados a atención médica y días después notificaron las autoridades el fallecimiento del menor.

En la escena y registros fue indispensable la práctica de estudios periciales que indicaron la forma en que se originó el fuego, del mismo modo Agentes de Investigación Criminal realizaron las diligencias que confirmaron el actuar del hombre; por lo que una vez integrada la información en la carpeta de investigación, la Unidad Especializada en Investigación de Homicidios solicitó a la autoridad judicial la orden de detención, siendo capturado y vinculado a proceso.

En el desarrollo de la causa penal y ante las pruebas irrefutables, científicas y periciales que integró la Agencia de Investigación Criminal y que fueron presentadas por el Agente del Ministerio Público, que mostraban a Noé Fabián “N” como responsable en la comisión del delito de homicidio en razón de parentesco, el imputado optó por reconocer su culpabilidad, acogiéndose a un procedimiento abreviado.

Por lo que el Juez dictó la sentencia condenatoria de 20 años en prisión, así como el pago de una multa y la reparación del daño a favor de familiares de la víctima menor de edad; negándole los beneficios establecidos por la ley, por lo que purgará su condena recluido en el Cereso de esta misma ciudad.