Luego del hallazgo de más fosas clandestinas en Veracruz, con lo que parecen ser 168 cuerpos, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) externó su preocupación por el aumento de estos casos, ya que mediante muestreo hemerográfico ha identificado, sólo entre entre 2017 y agosto de 2018, hasta 163 depósitos clandestinos de cuerpos, de los que se han exhumando, cuando menos, 530 cadáveres o restos, sólo 54 identificados, poco más del 10%.
Ante esta problemática, la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas y el Instituto Nacional Electoral (INE) firmaron un convenio por el cual la autoridad electoral compartirá los datos del Registro Nacional de Electores para facilitar la identificación de cuerpos encontrados.
El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, recordó que los datos del padrón electoral han sido útiles para identificar desde 2016 a cinco mil 316 personas y estar en proceso de corroborar la identidad de 17 mil 661 más, con procuradurías estatales, tribunales locales e institutos de servicios médicos forenses.
La CNDH actualizó el Informe Especial sobre Desaparición de Personas y Fosas Clandestinas en México dado a conocer en abril de 2017, el cual tenía un conteo, realizado mediante muestreo hemerográfico, de mil 143 fosas clandestinas de las que se recuperaron tres mil 230 cadáveres entre el 1 de enero de 2007 y septiembre de 2016.
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Con lo acumulado hasta el mes pasado, el total es de mil 306 fosas y tres mil 760 cuerpos encontrados entre el 1 de enero de 2007 y el 30 de agosto de este año.
El organismo nacional señaló, además, que el número de restos localizados en el país ascendió a un total de 165 mil 431.
La CNDH acusó que la existencia de fosas clandestinas es consecuencia de la falta de procuración de justicia pronta, expedita y eficaz, además de que son un desafío para las capacidades y recursos del estado mexicano.
Colectivos de búsqueda de desaparecidos, molestos tras no ser notificados de hallazgos
El gobierno de Veracruz invitó a colectivos de búsqueda de desaparecidos a visitar el predio aparentemente utilizado como fosa, en el municipio de Alvarado, donde se encontraron los últimos restos, luego de la molestia externada por activistas al no haber sido notificados por la autoridad sobre el hallazgo.
El gobernador Miguel Ángel Yunes aclaró que no se avisó a los colectivos de desaparecidos porque, de acuerdo con las normas, primero se tiene que hacer la investigación y la búsqueda, en la cual participó la División Científica de la Policía Federal.
El Ejecutivo señaló que se trata de cuerpos que tienen cuando menos dos o tres años sepultados, pues conforme los primeros peritajes, varios de esos restos corresponden a personas cuya desaparición se denunció entre 2013 y 2015.
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Yunes recordó que mediante la declaración de una persona la Fiscalía de General del Estado obtuvo indicios de que en ese lugar podría haber cuerpos, por lo que se utilizaron sistemas modernos como drones, sondas y radares, que permitieron detectar los restos y una vez ubicada la zona, se hizo una inspección física directa.
En la identificación de los restos es fundamental la búsqueda de desaparecidos; sin embargo, cada reactivo tiene un costo de 15 mil pesos, reaccionaron legisladores locales.
En Veracruz, según datos de la Fiscalía, solo en 2017 fueron encontradas 343 fosas clandestinas en 44 municipios. A inicios de 2018, dijo que hasta entonces habían sido encontrados 225 cadáveres, 335 cráneos y 30 mil 600 restos humanos.